Comencé desde cuando realicé mi tesis de pregrado, las dificultades por las que pasé me llevaron a tomar retos. Aunque hasta ese momento creí que todo me iba a ir bien, desde que intenté proponer mi anteproyecto se presentaron desafíos. Todo aquello me causó estrés, y me llevó a ser ágil en lo que hago ahora. Cuando terminé mi tesis, hasta llegar al revisor, me dije, ahora si me puedo dedicar a esto, y así fue. ✌💁

Aunque a lo largo de mi vida siempre me han pedido ayuda en redacciones o similares, llega aquel que confía en ti, incluso más que tu mismo, y sí, así comenzó mi trayecto entre dudas y búsqueda sobre qué era lo que requerían en este proyecto de tesis.

Ese fue mi primer reto en asesorías, no llegué hasta allí creyendo que podía hacer todo sin problema alguno, siempre fue un trabajo en conjunto, pensamos en las mejores opciones y en todo lo que intentaba decir el tutor.

Fue un proyecto en donde asistimos a ferias, hicimos entrevistas preguntando a personas del rubro para el caso de estudio. Así de a poco, con las dudas que teníamos pudimos reflejar soluciones. Los errores que cometí en mi proyecto los dejé, lo que me tomó más tiempo ya era menos. La mejor forma de avanzar es resolviendo dudas que para otros es "obvio".