Gabriel —
Volverte a ver
Había un solo error en esos ojos. Eran indescifrables.
Es que esa mirada transmitía inocencia pero a la vez la más sensual de las hazañas jamás realizadas, una que nos contaba lo que era el amor, o quizá tampoco eso, quizá solo me hizo alucinar, quizá la más indescifrable de todas las miradas, no era para mi.